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Los niños que toman una siesta tres o más veces por semana se benefician de un aumento del 7.6% en el rendimiento académico

La siesta se asocia con mejora la cognición, la salud psicológica y metabólica en niños.

La insuficiencia de sueño es un problema de salud pública, ya que está relacionado con mayor riesgo de enfermedades y pérdida de salud.
En todo el mundo, hasta un tercio de todos los niños experimentan dificultades para dormir y hasta el 20% tiene somnolencia diurna.
En niños y adolescentes esto puede ser perjudicial para el desarrollo y funcionamiento cognitivo, rendimiento escolar, humor, comportamiento, salud física y calidad de vida.

Este estudio caracterizó los hábitos de siesta del mediodía en 3819 niños de escuela primaria del estudio de cohorte de China Jintan, estudiantes de 4º a 6º.
Se recopilaron logros académicos y de comportamiento evaluados por los maestros, y medidas de psicología positiva autoinformadas que incluyen agallas, autocontrol, y felicidad. Las pruebas de CI se realizaron en un subgrupo. Los índices metabólicos, incluidos el índice de masa corporal y la concentración de glucosa en ayunas, se midieron mediante exámenes físicos. Para toda la muestra, evaluamos las asociaciones entre la siesta y cada resultado, ajustados por sexo, grado, ubicación escolar, educación de los padres y tiempo en la cama por la noche.


Los resultados arrojaron que los niños de padres que tenían una educación superior, dormían siesta más a menudo. Las niñas durmieron más frecuentemente que los niños.
Aquellos niños de 6º que durmieron la siesta tuvieron puntuaciones más altas en habilidades verbales y logros académicos. También mostraron una reducción de problemas de comportamiento.
Los niños de 6º que toman una siesta tres o más veces por semana se benefician de un aumento del 7.6% en el rendimiento académico.
También se observó que algunas frecuencias de siestas y una mayor duración se asociaron con un menor IMC. En cuanto a la glucosa en ayunas no hubo cambios significativos.
Los estudiantes que tomaron siesta 3-4 veces por semana hasta 60 minutos tuvieron mayor reducción de problemas de comportamiento.

En general las siestas frecuentes no mostraron ser resultado de un sueño nocturno insuficiente.
Aunque se trate de correlaciones, la siesta es una medida práctica y fácil de implantar con beneficios.

* Las noticias publicadas sobre estudios no suponen un posicionamiento oficial de ICNS, ni una recomendación clínica.
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